miércoles, 29 de junio de 2011

Video-poema. Javier López Clemente recita el poema "Mujer sola"


Algunas veces, rastreando por la blogosfera, encuentras verdaderas sorpresas realmente gratas y regalos inesperados de personas especialmente generosas. Estos raros milagros suceden muy de vez en cuando pero, el momento en que llegan, se reciben como si fueran una inyección de gasolina que te ayudan en la nunca sencilla tarea de continuar con esta aventura. Por eso hoy, desde este blog, creo necesario agradecer a Javier López Clemente (incansable promotor de la cultura en Aragón) el detalle de recitar el poema Mujer sola que escribí ya hará cosa de un año. El resultado es un video-poema con música de George Gershwin interpretada por un lánguido saxofón. Mis agradecimientos a Javier, a Sonolópez y a los actores Celestino y Adrielle. a continuación, el video-poema:


El próximo viernes, día uno de julio, a las 20:30 recitaré precisamente este poema y otros más junto al escritor Ricardo Díez en Tarazona (en la Sala Albiana, Avda. Navarra, 2), dentro del programa "Literatura en el cuarto espacio" financiado por la DPZ. Nos vemos!

lunes, 27 de junio de 2011

Pequeñas-grandes joyas del cine español: El crack (José Luis Garci. 1981) Alfredo Landa se recicla

Alfredo Landa como el detective Germán Areta. Fotograma de la película
Después de disfrutar de unos días desconectado del mundo virtual en una ciudad majestuosamente antigua he decidido volver a la blogosfera para hablar de una película que vi por primera vez justo antes de este miniperiodo vacacional. Un buen motivo para zafarse del infierno que nos acosa en todas y cada una de nuestras calles es sin duda disfrutar de una deliciosa tarde de sofá y buen cine. El crack, de José Luis Garci me parece una más que recomendable opción.
Germán Areta (Alfredo Landa) y El moro (Miguel Arrellán)
 Año 1981. Este que escribe nacía en ese mismo año así que no pudo vivir por experiencia propia el ambiente del Madrid de los años ochenta que muestra Garci y fotografía excelentemente Manuel Rojas. El comienzo, como toda buena película policíaca, es muy rápido y nos presenta al detective Germán Areta (Alfredo Landa) volviendo a casa por las calles nocturnas madrileñas en su Simca 1000, después de lo que suponemos una dura jornada de investigación. Con una rápida y contundente escena llena de tensión, en dos pinceladas, el espectador llega a conocer perfectamente la personalidad de Areta. Esta escena sucede en lo que parece un pequeño bar de carretera. Areta se encuentra allí cenando en una mesa que hay al fondo del local cuando irrumpen en él dos atracadores y amenazando al camarero con una navaja, se hacen con la recaudación de la caja. Acto seguido uno de los ladrones irá requisando una a una todas las carteras de los pocos clientes que a esa hora ocupaban el bar hasta que llega el turno del detective. Hasta ese momento Areta había seguido disfrutando de su cena mientras se producía el atraco, observándolo todo con tranquilidad y sin preocupación. Pero cuando uno de los atracadores se dirige a su mesa, Areta desenfunda su pistola y se hace con el control total de la situación. Recupera la recaudación de la caja y las carteras robadas a los clientes pero, en lugar de llamar a la policía, deja que los rateros se larguen. Cuando los atracadores se han marchado Areta pide el postre.
 Con esta escena que bien pudiera ser también de un típico western, Garci nos presenta a su personaje Germán Areta como un hombre que solo trabaja por dinero y que intenta pasar desapercibido,  sin meter las narices en los asuntos que no le encargan. De esta manera tan insólita, Alfredo Landa se muestra ante el público con un papel muy diferente a los que hasta entonces había interpretado y el personaje de Germán Areta representa así un punto de inflexión en su filmografía en la cual, posteriormente, veremos películas tan duras como Los santos inocentes, Sinatra o tan dispares como Por fin solos o Historia de un beso.
 En El crack los servicios de Germán Areta son solicitados por un padre que quiere encontrar a su hija antes de morir. Germán y El moro (Miguel Rellán) , su ayudante, comenzarán así a adentrarse en una historia muy confusa, repleta de silencios, un oscuro túnel en el que ninguna pista arroja un tímido atisbo de luz. Sin embargo Germán pronto advertirá el gran número de intereses que se despiertan a su alrededor para que abandone el caso, incluídos algunos de sus antiguos compañeros de la policía. En este momento la historia recuerda vagamente a El sueño eterno para dar paso después a un giro inesperado que la conectará directamente con Los sobornados de Fritz Lang.

 Con esta incursión en el cine negro, Garci homenajea a Dashiell Hammett y nos muestra una trama que bien pudiera estar diseñada para su personaje Sam Spade. La historia de Garci y Valcárcel, además, nos muestra el Madrid de los años ochenta, la espléndida Gran Vía llena de luces de neón conectada abiertamente, al final de la película, con Times Square de Nueva York, lugar donde se desenlaza toda la historia. El crack gozó de cierto éxito, tanto es así que Garci decidió realizar una continuación con El crack II, pero lo más destacable de esta película, sin duda, es la reconversión y recuperación de Alfredo Landa para el cine español. El crack ha sido para mí una grata sorpresa.


La Gran Vía madrileña en El crack

domingo, 19 de junio de 2011

Tres poemas nocturnos y un saxofón

 Dancing in the dark (Cannonball Adderley):


Sin título


A través de la niebla
la noche en vela
va cruzando el bar.


Yo solo soy un barco varado,
amarrado al astillero de una barra
cuyo final se desvanece, diluído,
detrás de la noche.


Quiero protestar 
pero tantos versos
me dejaron mudo.
Deseo mirarte
pero el humo de tu ausencia
me ha dejado ciego.


El cielo se cierra y se leja,
inalcanzable,
como un callejón sin salida.
Yo permanezco debajo, amenazado,
como un blanco fácil.


Esta noche estoy demasiado cansado.
No dormiré en casa.





Sedimentos


La mar en calma, mar rizada,
tan leve como tu cabello
cuando está enfurecido
deja en su retirada, de anochecida,
todos los esqueletos del océano
y todas las cuencas vacías
de las que, una vez, se fugó la vida.


Yo atesoro, uno a uno,
sus pequeños huesos como pequeños versos,
momentos,
para que una vez en la ciudad
me susurren
la brevedad de este poema





La última campana


La soledad fue un cielo de cemento
que se rompió
tras el tañido de la vieja campana
celebrando así los primeros versos,
que fueron besos,
sobre la media luna de tu espalda.


Quizá este instante
llovió alegría sobre tus labios
saciando mi sed
Quizá tu sangre, entonces
y la mía
fueron una sola cosa
por un instante


Pero desde esta barra de bar
que se diluye al final de la madrugada
en una nueva espera incógnita;
desde esta noche menos,
en el hueco de tu cama,
diviso aquella vieja campana
desquebrajada sobre la arena.


Se borraron ya todas las huellas.


Un plañido en el viento
está ahogado por el olvido
y el ruinoso campanario
ha quedado mudo.


Desde este silencio sombrío
yo, sigiloso,
me adentro en tu catedral.
Fotografía de Antonio López Pérez del blog Afotando
 Y así me despido por unos días de voluntario retiro vacacional en el que intentaré estar desconectado del Mundo-Blog. Hasta la vuelta!

AÑADIDO NECESARIO: HA MUERTO CLARENCE CLEMONS
Fotografía reciente de Clarence Clemons

El azar ha querido que hoy, sin tener ni idea de esta pésima noticia, haya elegido el sonido del saxofón para estos poemas. Me acabo de enterar que uno de mis músicos y saxofonistas favoritos ha muerto. Clarence Clemons, miembro de la E Street Band de Bruce Springsteen, ha perdido la vida a los 69 años de edad. Su saxo, sin embargo, nunca dejará de acompañarnos. Les dejo con el tema Jungleland con un solo de Clemons que siempre me ha parecido soberbio:

jueves, 16 de junio de 2011

Noche de guiñol


Embarcaciones en vela
atracadas en los puertos de la noche
desean cruzar el mar.


Dunas de huellas, desdibujadas,
bajo los vientos del desierto
desean formar itinerario.


Tú entonces me miras
y preguntas asombrada
qué hay en el sabor de tus labios
que tanto a ti me ata.
Tus labios,
que al besarlos me dan la vida,
tienen el sabor de la muerte
porque en ellos residen 
las calaveras de los besos antiguos.


Sobre todo este mundo
cierra bóveda la luna.
Y tú, ajena, observas divertida
desde supraceleste alcoba
tu nocturno escenario de guiñol

lunes, 13 de junio de 2011

Robin de los bosques (William Keighley/ Michael Curtiz. 1938)

 Este artículo fue publicado anteriormente en Cineuá y he recordado esta película gracias a la maravillosa reseña que 39escalones  ha escrito sobre  "El capitán Blood" (también con Curtiz y Flynn). También esta entrada está dedicada al amigo Borgo porque hace días nos deleitó con este relato
 

Uno de los géneros cinematográficos que más ha mutado a lo largo de la historia ha sido, sin lugar a dudas, el cine épico o de aventuras. Sin embargo, a pesar de tantos cambios y tantas visiones, resulta difícil hoy en día encontrar un ejemplo más claro y contundente de este género que la película de 1938 Robin de los Bosques. En esta cinta la mano maestra de Michael Curtiz, tras suceder en la dirección a William Keighley, imparte una excelente lección sobre el ritmo adecuado que debe seguir una narración cinematográfica de aventuras. Robin de los Bosques ofrece la consabida historia de Sir Robin de Locksley y la rebelión de los sajones contra el príncipe John de una forma tan efectiva y trepidante que, aún visionada en estos tiempos, no adolece en ningún momento de aspecto alguno anticuado. Sin ir más lejos, las escenas de acción protagonizadas a la perfección por Errol Flynn como herencia directa de las que ya protagonizó en el cine mudo Douglas Fairbanks, son frescas y están llenas de tensión; además la historia está salpicada por ciertas dosis humorísticas y románticas que completan así una cinta inolvidable por varias razones que veremos a continuación. Una de las mejores bazas con las que contó Curtiz para su película fue la excelente labor interpretativa de Errol Flynn como Robin Hood y de Basil Rathbone como Sir Guy de Gisbourne. Este enfrentamiento interpretativo fue dramatizado y plasmado en la pantalla al rodar un fragmento épico en que los dos caballeros disputan un duelo a espada. La escena de esta batalla a vida o muerte es ya mítica, con esas sombras de los dos actores proyectadas por la luz de los candelabros en las paredes del castillo que recrean un efecto visual impresionante para el espectador.

Y ya que hablamos de efectos visuales, es mi deber hacer mención al glorioso aspecto del technicolor ya que fue la primera película rodada con la técnica “three-strip Technicolor” por la Warner Brothers, lo que se tradujo en un coste de producción muy elevado. Recordemos que estamos en 1938, año en que las apuestas por el Technicolor no eran del todo claras. Pero lo cierto es que la cinta está impregnada de un bellísimo colorido en un lujo de ambientación rodado en California y con una excelente labor de fotografía a cargo de Tony Gaudio y Sam Rolito.

Para concluir me gustaría destacar el papel de Claude Rains como el Príncipe John y de Olivia de Havilland como Lady Marian y, de paso, contar una anécdota. La pareja Havilland-Flynn fue una de las más famosas de la pantalla mientras que en la vida real era extremadamente difícil rodar con ellos porque se llevaban a rabiar. En las escenas en que Robin debía besar a Lady Marian, Errol Flynn se atiborraba de ajos simplemente para molestar a su compañera de rodaje. En fin, historias del celuloide. Robin de los Bosques ganó un Oscar a la mejor banda sonora por la música de Eric Wolfgang Korngold, otro al mejor montaje para Ralph Dawson y un tercero a la mejor dirección artística de Carl Weyl. No son pocos premios si tenemos en cuenta que se presentó el mismo año que joyas como Ángeles con caras sucias (protagonizada por James Cagney, que anteriormente había sido propuesto para interpretar a Robin Hood) o Vive como quieras, película reseñada por el Dr. Quatermass en esta revista. Robin de los Bosques es una película obligada para todo aquel que sea amante del cine y para el que quiera descubrir cuál es de verdad el cine de aventuras.

sábado, 11 de junio de 2011

Rimas clásicas: Soneto, coplas y Castellón...

Pintura de Antoine Blanchard
 Flor nocturna


Un café gris pálido, confundido
con el cielo que cubre esta ciudad
y una copa sombría y un tupido
bosque nocturno, mundo sin piedad.


He buscado en un infierno, aturdido,
la más clara luz, brillante verdad
y he caído al barro y me he hundido
salpicado por la realidad.


Mi flor nace esta noche en Place Pigalle
como yo vine al mundo, sin pudor.
Llega del lodo, parto sin dolor.


Como yo esta noche, hambrienta de amor
olvidará aquel antiguo temor
y viviremos cerca del final.

Mouline Rogue por Antoine Blanchard

El pasado domingo el autor Miguel Ángel Yusta publicó en la sección Rincón de coplas del Heraldo de Aragón una de mis coplas acompañada por una emotiva reseña que agradezco y quiero mostrar hoy aquí:





Para acompañar a este artículo, unas nuevas coplas:


"Besos ardiendo en el cielo
de una pasión ya remota
es tu piel atardecida
son estos versos de jota"

"Suena siempre en San Miguel
la campana a los perdidos
pero es que yo siempre escucho
rumor de amores heridos"


"Por la ribera del Ebro
se oye una triste canción.
Ya se detiene este río
para rimarte su adiós"


Y para terminar, viaje fugaz a Castellón:

El pasado jueves estuve en Castellón con motivo de la presentación del libro Quizá mañana (Ed. Boreal 2011). En él se incluyen los 26 poemas finalistas del I Premio Internacional de Poesía "Mariano Sorribas" organizado por Ágora entre los cuales tengo el honor de estar presente con el poema Fin del tiempo que escribo a continuación:

Todos los versos
y cada poema que diseñe en esta noche
llegan ya demasiado tarde.

Cuando todos los andenes despoblados
me hablaban de ti,
tan solo restaba
un cuarto de saeta
para el abismo y el olvido.

Hoy que ya he traspasado
todos los relojes,
escribo desde las tinieblas de tu lejanía
a un tren de cercanías polvoriento
y a tu vacío asiento de al lado.

En Castellón tuve el placer de conocer al autor ganador del Certamen, Pascual Casañ Muñoz, así como a los autores M° Jesús Zapater Muñoz y Marcos Yáñez Velasco

martes, 7 de junio de 2011

"Cerdito de porcelana y otros microrrelatos", el buen gusto por lo breve (Raúl Garcés)

Ilustrado por Manuel Jurado Garrido

El escritor Raúl Garcés fue premiado como ganador del Concurso Esculpiendo historias de 2010 convocado por la Editorial LA FRAGUA DE METÁFORAS con el microrrelato Cerdito de porcelana, de tan solo siete palabras y una coma. Resulta de una dificultad extrema contar una historia en tan poco espacio pero para Raúl Garcés se ha convertido ya en una buena costumbre que lleva a cabo con una aparente facilidad asombrosa. Este premio y el buen gusto por la literatura minimalista le ha llevado a publicar su primer libro titulado Cerdito de porcelana y otros microrrelatos (Ed.FRAGUA DE METÁFORAS 2011) Los relatos de Raúl son ilustrados por el ilustrador Manuel Jurado Garrido. Esta cuidada edición y por supuesto, la calidad de todos y cada uno de los jugosos microrrelatos que nos ofrece este escritor zaragozano, demostrando su sobrado ingenio, convierten a este libro en un pequeño gran tesoro que se puede adquirir aqui .  Y como aperitivo Raúl Garcés nos ofrece uno de los micros que forman esta singular publicación. 

"Como ganado"


Nos lleva como ganado - protesta, asido a la barra, entre acelerones y frenazos en un autobús repleto de gente. El conductor sonríe con malicia. A lo lejos ya se divisa el matadero municipal.

(Autor: Raúl Garcés)

¡Enhorabuena Raúl!
El autor, Raúl Garcés

sábado, 4 de junio de 2011

Tránsito vital


Me gusta pensar
que tú eres el pilar sólido
donde se asienta
el agrietado templo de la existencia.
Pero hay días en que me siento
columna labrada y estirada,
empeñada por llegar al cielo.
Entonces, intento alcanzarte
hasta que consigo ser capitel
teñido en rojo, por tus labios,
coronándome como otro día fugado.

Seré, entonces, un beso
que acabe por derribar el templo
o que lo sostenga en pie una eternidad,
perdurable objetivo del tortuoso camino.
Tú serás helena de melena al viento,
desordenada columnata de orden corintio
que solo me ordene una dirección.

Pero, una noche más,
la hoguera de palomas, ejército del día,
echa a volar detrás del mar Egeo,
perpetuo telón de piedra.
Un día menos, en las sombras,
cualquier paisaje es infinito.

No hay luna suficiente
que ilumine el mármol
de este olvidado Partenón
ni luz tan brillante
que establezca límites
en tus inmensos ojos tristes.

jueves, 2 de junio de 2011

Nuevo Número RAÍCES DE PAPEL (Nº6) y un micro-poema



La nueva edición de la Revista Raíces de papel viene cargadita de sorpresas. Aquí pueden descargarla. A continuación les comento los contenidos de este nuevo número:

ENTREVISTAS:

Julia Gallo Sanz entrevista al ilustrador Jesús Prieto Revuelta
Marcos Callau entrevista al escritor Miguel Ángel Yusta
Marcos Callau entrevista a la artista Begoña Maza Martínez

ARTÍCULOS:

María Pilar de Cecilia: Ana María Matute, Premio Cervantes 2010
Antonia Pons Coch: Josefina Aldecon
Milagros Salvador: Juan Filloy, una invitación a su lectura
Jaro Godoy: Delmira Agustini: El poema inconcluso
Amelia Peco: Tres mujeres cochabambinas
María del Carmen Gago Fiorenti: Giovanna o la primavera florentina
Reyes Cáceres Molinero: Una fiesta del Arte: Exposición "Jardínes expresionistas" y "Miradas", exposición de Maruchi Molinero
José Antonio Rodríguez Hodar: Juan Luis López Amaya: Artista y amigo

GRAFOLÓGICAMENTE HABLANDO:

Nuria Sánchez Caravaca: Grafología

EL ALMA DEL POEMA:

Juan Luis de Torres: "El Alma del poema"

POESÍA:

José Javier Aleixandre: "Todavía"
José Iglesias Benítez: "Niebla"
Blas Muñoz Pizarro: "El silencio de Dios"
Carmen Rubio: "1"
Alejandro Moreno: "Como un sediento muro"
Raúl Calvo Varela: "Decir"
Reyes Cáceres Molinero: "Las veinticuatro horas del bosque"
Francisco Miguel López Jiménez: A Juan López Pinto, in memoriam
Ana Romano: "Cautivo" y "Añoranza"
Eladio Méndez: "Alas de ceniza"
Elisa Berna: "Quito laberíntico"
Francisco Javier Carmona Camarero: "Abel" y "Ulises"
Fernando Fiestas: "EL exilio frente al espejo"
Francoise Roy: "He aquí que amanecí"
Ramiro Gairín Muñoz: "La loca celeste" y "Tolkeyen"
José María Izarra: "Autoretrato", "Salmo", "Nu Cn"
José López Rueda: "A José López Martínez"
Marta De Arévalo: "Anagrama chino"
Nélida Lemos Paganini: "Miel y Sal"
Oswaldo Roses: "Esta madrugada de mala noche"
Partricia K. Olivera: "Soy"
Pedro Tenorio: "En Colliure"
Plácido Ramírez: "La cifra azul de nuestra infancia"
Rolando Revagliati: "A Miguel Hernández"
Ronald Bonilla: "Pastor de la sangre"
José Cercas: "Volveré a escribir tu nombre"
Manuel Giménez González: "Inicio del poema"
Valeriano Franco: "Páramo"

NARRATIVA:

Alejandro Moreno: "La azotea roja"
Roberto Malo : "El regalo"
Soledad Cavero: "El poder de la envidia"
Paloma Hidalgo Díez: "Adelante"
Carlos Fernández Carbonell: "Su norte"
Javier Bueno: "La fuente amarga"
Juan Calderón Matador: "Las medias azules"

TEATRO:

José Manuel Sitio: "El pistoletazo"

RESEÑAS:

Milagros Salvador: "Dos minutos y medio" y "Hijos del trueno"
Julia Gallo Sanz: "Corales"
María Cristina Borobio Ibarrondo: "R-Textos (Reflexiones con fecha)
Pedro Carrero Eras: "Kilómetro 0"
Marta de Arévalo: "El árbol de las ausencias"
Agustina García Manzano: "Con otro final"
Marisol Mariño: "Canto a Lillith"
Maite Freire Pérez: "Sueño de libertad"
Francisco De La Torre Díaz- Palacios: "Blanco, negro y otro color"
Reyes Cáceres Molinero: "Los vientos de la tierra"
Pepa Nieto: "Últimos pasos"

Quiero dar la bienvenida a Roberto Malo y Elisa Berna por sus primeras colaboraciones con la revista  y en general, a todos los recién llegados.

Como aperitivo, mi primer micropoema:

"En tu mirada, mil naufragios
a punto de desbordar tus pupilas.
Yo los espero todos, desde mi desierto"

AÑADIDO NECESARIO, 3 de junio

Hoy miércoles, tres de junio, se entregará en Zaragoza el Premio Poesía Miguel Labordeta al escritor Blas Muñoz Pizarro, quien también forma parte de la plataforma cultural "Raíces de papel". Esta tarde, a las 20:00 h. en el edificio de Capitanía General (Plaza Aragón, 9). Enhorabuena Blas!